Los Andes, 11 de mayo de 2025 – En un ambiente de orgullo y emoción, el Liceo Comercial de Los Andes conmemoró este viernes su 82° aniversario con un acto solemne que reunió a todos los estamentos del establecimiento: estudiantes, docentes, asistentes de la educación, directivos y apoderados, junto a invitados especiales del ámbito educacional y local.
La ceremonia, realizada en el gimnasio del establecimiento, fue un momento de profundo significado para la comunidad educativa. Por primera vez, la -Banda de Guerra del liceo tuvo una destacada participación, acompañando con marcialidad y solemnidad el ingreso de los estandartes y la entonación del Himno Nacional, lo que fue ampliamente valorado por los asistentes.
El aniversario recordó la fundación del liceo el 11 de mayo de 1943 por el educador normalista don Manuel Díaz Paredes, quien dio vida al entonces Instituto Comercial de Los Andes con una visión clara: formar técnicos profesionales competentes, ciudadanos comprometidos y personas íntegras. Esa misión fundacional sigue guiando el quehacer del establecimiento y su proyecto educativo institucional.
En su discurso, el director del Liceo, don Juan Carlos Saa, destacó el legado de generaciones pasadas y la responsabilidad compartida de proyectar una educación con valores, sentido ético y compromiso ciudadano. Todos quienes han pasado por nuestras aulas han dejado una huella imborrable de esfuerzo, vocación y servicio”, señaló.
El acto fue también una oportunidad para reafirmar los principios fundamentales que orientan la formación del alumnado: respeto a la vida, derechos humanos, ciudadanía, disciplina y perseverancia. Se hizo un llamado especial a las nuevas generaciones a tomar la posta de esta rica historia educativa, con la convicción de que la educación es un motor de transformación personal y social.
Con 82 años de existencia, el Liceo Comercial de Los Andes sigue siendo un pilar formativo del Valle del Aconcagua, aportando al desarrollo regional con jóvenes preparados humana y profesionalmente para enfrentar los desafíos del presente y del futuro.